5 de abril de 2010

La fachada del canje

Los amigos de las FARC quieren revivir el entusiasmo por la falacia del intercambio humanitario. Con las liberaciones de Semana Santa han puesto nuevamente de moda la exigencia del canje de terroristas condenados por uniformados secuestrados.

Resulta fundamental no perder de vista los oscuros motivos de las FARC para mantener como secuestrados políticos, según ellos prisioneros de guerra, a un grupo de policías y militares con algún rango dentro de las fuerzas armadas. El anhelo de ‘Tirofijo’, la ley de canje, es compartido no solo por el Secretariado de las FARC, sino por el grupo Colombianos por la Paz, quienes buscan el establecimiento de un mecanismo permanente para el intercambio de secuestrados por condenados.

Sin embargo, la utilización de los militares secuestrados tiene propósitos más siniestros que la presión para lograr un canje. Con los grotescos espectáculos de las liberaciones, y la nueva andanada de exigencias para el intercambio, las FARC y sus socios quieren mantener viva la fachada de insurgencia, detrás de la cual quieren ocultar y justificar su creciente participación en el narcotráfico.

Es que internacionalmente resulta cada vez más difícil que se le otorgue reconocimiento político a un grupo violento dedicado al tráfico de droga. Sin embargo, con las atrocidades disfrazadas como acciones motivadas en lo político, las FARC siguen vendiendo la apariencia de conservar sus propagandísticos propósitos altruistas y justicieros.

El macabro espectáculo de los últimos días, incluida la “liberación” de los restos mortales de Julián Ernesto Guevara, fue planificado con todo cuidado para lograr un impacto importante en lo mediático. Las FARC y sus socios saben que durante Semana Santa las noticias escasean y los medios están ansiosos de tener una información impactante para ocupar el espacio que de otra manera se concentraría en las actividades religiosas y en los operativos que se realizan en las carreteras del país. Las liberaciones en Semana Santa consiguieron capturar la atención de los medios y del público en el siniestro circo de Piedad Córdoba y su horda “humanitaria”.

Ya con la atención de los ciudadanos, las FARC y sus socios han dado el siguiente paso: revivir la exigencia del intercambio humanitario, enfilando baterías para culpar al gobierno de ser inflexible en una presunta negociación que ellos quieren mostrar como altamente conveniente para el país. Naturalmente, los abanderados del canje no mencionan las exigencias tozudas de las FARC ni mucho menos permiten que se recuerde el desprecio con el que los terroristas han recibido las muestras de buena voluntad del gobierno.

Si la intención fuera honrada, Piedad Córdoba, Gloria Cuartas, Iván Cepeda y demás Colombianos por la Paz tendrían que empezar por reconocer que el gobierno Uribe ha realizado no una sino dos liberaciones masivas de guerrilleros condenados, situación que los áulicos del terrorismo quieren dejar en el baúl del olvido.

Sencillamente esas liberaciones no sirvieron, según los "humanitarios", pues no fueron el resultado de una negociación y por consiguiente, no merecen el reconocimiento de las FARC. Pero la óptica cambia, como ocurre en aquellos vanidosos de la doble moral, cuando son los terroristas los que hacen “gestos humanitarios” de manera unilateral: ésos sí son ejemplos de buena voluntad y son vendidos al mundo como evidencias de los propósitos altruistas de buscar una solución política negociada al conflicto.

Lo cierto es que las excarcelaciones ordenadas por el gobierno no sirvieron a los propósitos de las FARC, pues no abrieron un escenario mediático y de presión que les permitiera obtener alguna ganancia política. En otras palabras: la negociación para el intercambio “humanitario” debe hacerse únicamente en los términos que le convengan al terrorismo, pues modificar las imposiciones de las FARC, resulta un acto inaceptable para los entusiastas de la claudicación.

La honradez tampoco les alcanza para explicarle al mundo la pretensión de excarcelar a peligrosos terroristas que están condenados por crímenes de lesa humanidad. ¿Cómo van a vender la idea de lanzar nuevamente a las calles y a los campos, a individuos que han sido condenados por secuestros, atentados con bombas y asesinatos despiadados de civiles y militares?

Tampoco se puede aspirar a que los abanderados del canje aborden siquiera las condiciones que deberían cumplir las FARC para concretar un intercambio. En este sentido, jamás dirán algo sobre un compromiso del terrorismo para no volver a secuestrar, ya sea por supuestos motivos políticos o económicos.

La posición del presidente Uribe —de condicionar la liberación de guerrilleros a un compromiso de los excarcelados de no volver a delinquir— es completamente coherente con el mandato que tiene el Estado de velar por la seguridad de sus asociados. Así mismo, la decisión de abrir la posibilidad de un canje únicamente con los condenados por crímenes que no sean de lesa humanidad, representa el acatamiento de las normas internacionales que impiden cualquier concesión frente a ese tipo de delitos.

En el juego macabro de las FARC y de sus "humanitarios" secuaces, la exigencia es que los colombianos debemos abrir un escenario en el que se revitalice el secuestro y se vuelva cotidiano el intercambio de terroristas condenados por militares plagiados. A los únicos que les conviene semejante adefesio es a las FARC, a los políticos amparados en la imagen de luchadores por la paz y a los medios de comunicación, que tendrían de vez en cuando la posibilidad de cautivar al mundo con el espectáculo del intercambio de servidores públicos por criminales. Sobra decirlo: los civiles secuestrados no serán tenidos en cuenta, pues no representan un músculo eficaz para doblegar al Estado.

Por Jaime Restrepo.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

BRABONEL.

Esta ultima liberación fue como una proyección de lo que le espera a las farc y a quienes le quieren sacar partida política al secuestro. Sueltan a Calvo montan un circo alrededor que hace pensar que el hombre no estaba sufriendo sino que llegaba del paraíso, Calvo no habla y son las frases de los Colombianos por las farc las que llenan ese vacío pero los Colombianos estaban esperando alguna declaración de Calvo, los medios de comunicación aliados repiten el libreto y rodean a piedad y a sus secuaces con un servilismo que fastidiaba con el único objetivo de hacerle creer a la opinión que ese era el camino y que no había otro. Días después llega Moncayo y con la complicidad de esa familia las cosas se prestan de mejor forma para los aliados del terrorismo. Hasta ahí todo va bien, dentro de lo que se podía con una estrategia que está perdiendo impacto en la opinan publica como son las escenas repetitivas donde aparece Piedad Córdoba moviéndose de un lugar a otro dando declaraciones y mostrando satisfacción por la terea cumplida pero ante todo queriéndose apropiar de una figura que refleje la de una mujer combativa por la búsqueda del bienestar de los prójimos en sufrimiento, que luego aparezca en redes sociales de internet y con un acompañante haciendo el papel de robín no cambia en nada, un libreto por muy bueno que sea solo sirve para la primera proyección lo repetitivo cansa. Lo que realmente dio un giro en este juego macabro montado por la izquierda social y armada fue la entrega de los restos del coronel Guevara, una situación que no estaban acostumbrados los colombianos. El secuestro quedo al desnudo pero ante todo los sentimientos de las farc, ya sé que las farc desde hace mucho son unos hijueputas pero torturar a un hombre en vida para luego seguir torturándolo a él y a su familia después de muerto hace que se pierde por completo la capacidad de compresión y alguna forma de calificarlos, las hijueputadas y algún odio que se puede desprender por su existencia simplemente pierde sentido, las farc y Colombianos y Colombianas por la paz y quienes desde las orillas las apoyan lograran presionar al próximo Gobierno que hagan el intercambio humanitario o como lo quiera rebautizar, pero no habrá significados políticos simplemente las farc serán vistas como a unos monstruos enjaulados en la selva que les arrogaran alguna presa podrida.

Toda la estrategia montada por los Samper los López los Colombianos y Colombianas por la paz los del partido comunista nacional e internacional etcétera (que terminan siendo lo mismo) de llenar las mentes de los Colombianos con la idea de que el secuestro y demás actos demoniacos de las farc era producto de una “degradación de un conflicto” que necesitaba pronta solución se les callo con la entrega de los restos del mayor Guevara ¿después de esto quien va a creer que lo de las farc tienen solución humana?

Ultraninja Reloaded dijo...

Don atrabilioso, y el vecino loco comprando 5.000 millones de dolares en armamento super moderno, nuestros ministros de defensa mientras tanto rascandose las que sabemos. Es hora de prender las alarmas, con lo que tiene chavez no aguantamos dos dias.

Atrabilioso dijo...

BRABONEL:

Leí la rabieta de Daniel Samper por el escaso interés de los colombianos en las liberaciones. Él hizo un seguimiento en El Tiempo y encontró que la campaña mediática no consiguió los resultados esperados.

Otra cosa interesante es que en el informe de las liberaciones, publicado por NTN24, de casi 2 minutos de emisión, solo salieron dos escenas de 5 segundos cada una, con la imagen de la señora Córdoba.

Su última reflexión es importante para entender algo de la posición del público frente a las FARC.

Un abrazo.

Atrabilioso dijo...

ULTRANINJA:

Esa carrera armamentista que sigue profundizando el dictador venezolano realmente TIENE que encender las alarmas en Colombia. Cada operación de esas, hace crecer la amenaza contra Colombia y nuestra modestísima capacidad de respuesta.

Pero ojo, porque esas compras son un mecanismo de presión con miras a las elecciones del 30 de mayo: si eligen mal, los bombardeo. Y ese mensaje está llegando, pues hay segmentos de la población que creen que con Mockus no hay riesgo de guerra y puede apaciguarse al tirano.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Chávez se apresura en tratar de influir en las elecciones Presidenciales Colombianas por que cada vez Venezuela se convertirá en un tema marginal para Colombia. En los próximos cuatro años el PIB Colombiano se expandirá con fuerza mientras que el de Venezuela se seguirá contrayendo y les será más difícil no solo seguir adquiriendo armas sino también hacer viable la sostenibilidad de una guerra con un país mas prospero que ellos. Dentro de ese periodo el mercado Venezolano ya no será añorado por que el empresariado Colombiano que estará exportando hacia diferentes destinos donde no darán abasto. Colombia experimentara lo sufrido por el Uruguay después de la crisis Argentina, el país oriental no solo encontró mercados mas grande para vender sus productos sino también un mar de posibilidades para agregarle valor a sus exportaciones y desarrollar nuevos productos.


Si la maquinaria liberal apoya a Muckus, Noemí pasa a tercer lugar y la gente que la sigue optara por el voto útil haciendo que Juan Manuel Santos acapare esos votos, si Mockus no sube en las encuestas la única posibilidad real de campaña se les cae. Entonces Chávez presionara para que la maquinaria del partido liberal del polo apoye a Mockus de lo contrario no tendrán ninguna posibilidad.

Atrabilioso dijo...

ANÓNIMO:

El asunto, como usted lo describe, es de una coyuntura de 90 días en que el dictador intentará mover toda su maquinaria, con las excentricidades armamentistas, para influir en la decisión de los electores. Él sabe que es ahora o nunca y por eso está determinado a presionar las elecciones.

En cuanto a Mockus, creo que arrastrará votos útiles del Polo y del partido Liberal y eso generará un efecto en los votos uribistas que buscarán asegurar el paso en primera vuelta.

Un abrazo.