4 de marzo de 2010

Samuel: ¡Renuncie a la Alcaldía del T.C.!

Bogotá es la capital del caos por cuenta de la parálisis del transporte público que ha desembocado en una asonada que se agrava con el pasar de las horas y cuyas consecuencias son inciertas. A pocos minutos de publicar este texto, los desmanes están en pleno desarrollo en Ciudad Bolívar y Suba.

El paro de los pequeños propietarios de buses y busetas, según el Alcalde, tiene su origen en el reordenamiento del transporte de la ciudad. Ahí está el primer error, pues la parálisis tiene que ver con el precio que propone el Distrito para comprar los vehículos que actualmente prestan el servicio de transporte, y no con el reordenamiento en sí.

Los pequeños propietarios no están en contra del Sistema Integrado de Transporte, SITP. Ellos están pidiendo un pago razonable por sus vehículos. Es que la Alcaldía pretende, en una sofisticada operación de expropiación de propiedad privada, pagar los buses casi por la mitad del precio del mercado.

El asunto se puede explicar con un ejemplo. Doña Susana adquirió un bus, modelo 2008, por 240 millones de pesos. Para hacerlo, obtuvo un crédito por el que paga mensualmente 4 millones de pesos. De repente, la Alcaldía publicó una tabla según la cual, doña Susana recibiría cerca de 120 millones de pesos y un pago mensual cercano al millón, como utilidades por su vinculación al nuevo esquema de transporte colectivo.

Esto significa que doña Susana podría amortizar 120 millones a la deuda adquirida, pero quedaría pagando un crédito de 120 millones por algo que no le está generando ningún beneficio y de lo cual, en realidad, ya no sería propietaria. Además, la cuota mensual que deberá seguir pagando estará por encima de los 2 millones y con las utilidades de su vinculación, no podrá cubrirla, ni satisfacer las necesidades mínimas de su familia. Total: su patrimonio quedará a merced de los acreedores.

Siguiendo con el caso de doña Susana, es importante anotar que el bus fue matriculado en Bogotá y los diferentes documentos de operación fueron expedidos por la Secretaría de Movilidad de la ciudad. ¿Si Samuel Moreno sabía que en un par de años intentaría poner en operación el SITP, por qué siguió matriculando buses y busetas durante los años 2008 y 2009?

Ahí hay una cuota de responsabilidad -mejor de irresponsabilidad- de la administración distrital. El Alcalde es tan caradura que sale ante los medios a sostener que la idea del SITP es la modernización de la flota de transporte colectivo que sirve a la ciudad… ¿le parece viejo un vehículo modelo 2008? ¿Desde cuándo la depreciación de un automotor es del 25% anual?

Ciertamente algunos de los participantes en el paro son dueños de vehículos antiguos, pero ellos en general no tienen una deuda gigantesca y el pago de reposición se aproxima al valor real de sus buses. Sin embargo, la mayoría de pequeños propietarios tienen vehículos de modelos recientes, que ahora, de repente, son material para chatarrizar, según el alcalde Moreno.

No se puede negar que el sistema de transporte de Bogotá es perverso: 44 personas son dueñas de las empresas que afilian los vehículos y solo a través de ellas se puede acceder a la asignación de rutas y horarios, previo pago mensual de cuotas que se salen de toda proporción. Este esquema de transporte se puede definir como unos pocos oportunistas que viven del trabajo de más de 16 mil propietarios de vehículos.

La administración negoció con los 44 oportunistas y excluyó a los pequeños propietarios, que son los que aportan trabajo y equipos. Después de afinar los pactos con los “dueños” del transporte, la Alcaldía expidió la tabla de retoma que había acordado con los capos de las rutas. A ellos poco les importa el precio que pague la administración por los vehículos, pues no son dueños del parque automotor y su negocio está asegurado desde hace tiempo, gracias a los pactos establecidos con el Alcalde cuando era candidato.

Ahí estuvo el segundo error. En una tozudez enorme, la Alcaldía se ha reunido varias veces con los 44 empresarios, quienes le han prometido al gobierno de Bogotá, que los buses estarán en las vías en unas horas. Esos 44 “dueños” de rutas pueden prometer el oro y el moro, pero al no tener la propiedad de los vehículos, sus promesas son vanas. Durante el segundo día de paro, Moreno y la señora López Obregón salieron felices a anunciar que el paro había terminado, pues habían obtenido el compromiso de los capos. Los bogotanos, candorosos a morir, les creyeron y salieron a la calle. Pasaron las horas y los buses siguieron guardados.

Pero la Alcaldía es como Jalisco, que no se raja, y en la noche siguió insistiendo con los 44 empresarios, despreciando a los verdaderos dueños del transporte en la ciudad.

Moreno reconoce su ineptitud, y no se inmuta

Anoche, en una rueda de prensa, Samuel Moreno comenzó por señalar que “nosotros sabíamos lo que iba a pasar”. ¡Caramba! Moreno y su pandilla son como el Chapulín Colorado: todo estaba fríamente calculado y sin embargo, no hicieron nada para desactivar la bomba y tampoco se ocuparon de tomar las medidas que impidieran las gravísimas molestias que el paro ha causado en la ciudadanía.

Es el colmo de la ineptitud que un gobernante conozca las consecuencias de una medida y no haga nada por neutralizar la situación. Lo peor es que la rueda de prensa fue convocada para anunciar un paquete de medidas extraordinarias para conjurar el paro. Después de escuchar a Moreno Rojas, todavía estamos esperando las medidas extraordinarias, pues sólo expuso acciones comunes que se están aplicando desde el segundo día de paro.

En ese paquete de medidas “extraordinarias”, Moreno incluyó la suspensión del pico y placa para vehículos particulares, lo que se viene haciendo desde el martes y tiene a la ciudad colapsada.

Eso de levantar el pico y placa es uno más de los absurdos del Alcalde. Quienes tienen vehículo, en su gran mayoría, optan por el servicio de taxis y no por el transporte colectivo. Además, aquellos propietarios de particulares que utilizan Transmilenio, pueden prescindir del transporte masivo y movilizarse en un taxi. A la postre, levantar el pico y placa, lejos de aminorar los problemas, los agrava, pues la ciudad es un cúmulo de obras atrasadas o abandonadas que diariamente hacen colapsar la movilidad.

Ya es costumbre

Samuel Moreno ejerce sus funciones, no como alcalde sino como dictador. Los residentes de varios conjuntos en Ciudad Salitre saben que el alcalde utiliza la técnica de la emboscada para tomar desprevenidos a los ciudadanos. Así pasó con la nueva estratificación y así está pasando con los transportadores.

De repente, con una metodología inexistente, el desgobierno de Bogotá seleccionó unos cuantos conjuntos y les incrementó el estrato. Cuando las autoridades vieron que la comunidad se estaba uniendo, enviaron cartas a los conjuntos excluidos temporalmente del aumento para desterrar la solidaridad.

17 meses de retraso en las obras de la Fase III de Transmilenio, casi 2 años de demora en la entrega de unos simples andenes, millones de pesos utilizados en burocracia en el Fondo de Vigilancia y Seguridad, compra de votos para determinados candidatos del Polo en algunas dependencias de la Alcaldía Mayor, son motivos suficientes para decirle a Samuel Moreno: ¡Renuncie! Y hágalo ya.

Pero también es bueno recordarles a los bogotanos que semejante hecatombe, y su profundización, se debe a la estupidez de haber elegido a dos ineptos como alcaldes mayores de Bogotá. Luis Eduardo Garzón comenzó con el deterioro y Samuel Moreno avanza raudo en la demolición de Bogotá T.C., es decir Bogotá Tugurio Capital. De lo sembrado por Castro, Mockus y Peñalosa no queda prácticamente nada. ¡Sigan votando bien! Al paso que van, la capital del país pasará a otra ciudad y Bogotá será solo un moridero habitado por prepotentes que juran que la cloaca en la que viven es el ombligo del mundo.

Por Jaime Restrepo.

16 comentarios:

D. dijo...

Yo le perdí todo respeto a los capitalinos que tanto se las dan de "progres chéveres" desde que eligieron a Garzón de alcalde.

Y ya me cansé de decirles "se los dije", porque si alguien pintaba mucho peor que Garzón era precisamente Moreno y el acoplamiento (apareamiento) entre la ANAPO y el PDA.

Atrabilioso dijo...

D:

Tengo un cargo de conciencia: recién elegido Moreno Rojas hablaba con un amigo común y yo le decía que Samuel sería mejor que Garzón, que parecía tener más espíritu de trabajo y que en un primer momento, prometía rodearse con menos ineptos. !Qué vergüenza con nuestro amigo!

¿Sabe? Es que en el fondo pensaba que no podía darse un desgobierno peor que el de Garzón... pero me equivoqué y no tuve la capacidad de ver lo que se venía encima.

Aprovecho de una vez para disculparme ante ese amigo.

Un abrazo.

Ruiz_Senior dijo...

Atrabilioso, no se debe olvidar que la izquierda democrática manipuló a mucha gente con el cuento de la lucha de clases: Peñalosa era el candidato de los ricos. Samu, el de los pobres. El del pueblo. El día que una persona examina con atención lo que significan esas ideas de repente sale claro el núcleo de todo el "conflicto".

Es decir, ¿por qué realmente todo el mundo cree que el interés de los ricos es opuesto al de los pobres y que lo que falta es justicia en el sentido de despojo a unos para repartir entre los otros? Si fuera por políticas que favorecieran a las mayorías y perjudicaran a los más ricos, ahí está la alcaldía de Peñalosa, precisamente. Pero tratándose de la vida urbana lo que afecta la gestión de un alcalde no es la redistribución de la riqueza ni la preocupación por los más necesitados sino la atención al interés de todos los ciudadanos y no de grupos de interés que siempre son de algunos ricos pero que no son funestos por ser de ricos sino que son ricos a causa de las ventajas que les ofrecen las administraciones corruptas, de las que el PDA es precisamente un ejemplo.

En esa mentira increíble se cifra todo el problema. El colectivismo crea lealtades perversas que sostienen el atraso y que pueden llevar a países como Colombia a la situación venezolana, con asesinatos de periodistas y todo.

Ultraninja Reloaded dijo...

Excelente analisis, pero no se le olvide que lo vaticine aca, Samuel Moreno seria el peor alcalde en la historia de la ciudad, siguio el ejemplo de su hermano Ivancho... Pero sigan votando por esa corriente, por darselas de inteligentes mamertos mire como dejaron la ciudad echa trizas, hoy en dia la peor ciudad de suramerica, no mas mire como progreso Quito, La paz u otras ciudades que hace una decada eran peor que Bogota como Lima. Sigan votando Polo...

Atrabilioso dijo...

JAIME:

El paro ha desnudado, una vez más, la relación entre los sectores influyentes (parasitarios y adinerados) con la izquierda "democrática".

Más allá de eso, es que no puedo sentir más vergüenza por pensar que Bogotá había tocado fondo con Garzón. A Moreno Rojas no le sale nada bien, pero seguramente Carlos Romero e Iván Moreno saldrán elegidos gracias a los esfuerzos (léase clientelas y corrupción) de la Alcaldía Mayor del T.C.

Como Samuel está molesto porque los medios publican todas sus equivocaciones, entonces optó por acercarse a los medios "alternativos", y a punta de pauta, invitaciones y halagos, está obteniendo figuración en los medios de barrio, que son respetables y casi heróicos, pero débiles frente a las presiones y coqueteos al ego.

De otro lado, una alta cuota de responsabilidad por la continuidad del PDA en la Alcaldía es del propio Peñalosa... ¿cómo es posible que faltando menos de un mes para las elecciones, no tuviera ni siquiera jefe de prensa? El triunfalismo y la soberbia condenaron a Bogotá a retroceder varios lustros.

El que gana algunos puntos con el paro es Vargas Lleras. Su pronunciamiento fue el único contundente de todos los candidatos: "No hay Alcalde, no hay gobierno, no hay programa, no hay nada en Bogotá... ¿qué hace todavía el Polo en la Alcaldía?"

Un abrazo.

Atrabilioso dijo...

ULTRANINJA:

No se vaya tan lejos: Vea lo que es Manizales hoy en día, o Villavicencio o Medellín. Incluso Cali, con todo y problemas. Me sorprende Manizales sobre todo, pues pasó de ser un pueblo grande y bonito, a una ciudad con una infraestructura impactante, con avenidas espectaculares construidas doblegando la topografía, con organización de transporte... en fin. Lo mismo pasa en Villavicencio que dejó su pasado de pueblo sediento, para convertirse en una ciudad con todas las letras.

¿Y Bogotá? Bien, gracias. Aumentando el parasitismo generado por el asistencialismo, con clientelas poderosas, con un personero cuestionado desde las épocas en que fue constituyente, con obras que son contratadas para que las ejecuten abogados y no ingenieros... eso de todo puede ser peor lo confirma Samuel Moreno con su mediocre e inepta Secretaria de Gobierno.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Que es eso de obras para abogados y no para ingenieros??? Absurdo.

Anónimo dijo...

No creo que el polo democratico gane de nuevo la alcaldia de Bogota, para mi en las proximas eleciones saldra mucha gente a votar en contra del PDA y la maquinaria no les alcansara. Esta alcaldia le pegara electoralmente duro a la izquierda en las eleciones venideras, los mismos medios aliados aseguraban que dependeria de la alcaldia de samuel si la izquierda subia o bajaba y como ven no pudo ser peor de lo imajinado, ese señor moreno no tiene ni el 20% de popularida.

Atrabilioso dijo...

ANÓNIMO DEE LAS 5:11

Cierto. Es absurdo, tanto que es lo que viene pasando en Bogotá. Las empresas son convocadas a licitaciones de obras mal planeadas, sin diseños definidos o sin posibilidades de culminación por cuenta del presupuesto. Entonces participan, ganan, empiezan obra y luego llegan las tradicionales demandas contra el Estado. Esa operación se conoce como obra sin ingenieros.

Entonces, claro que es absurdo, tanto como lo que hace Moreno en Bogotá.

Un saludo.

Atrabilioso dijo...

ANÓNIMO:

También creo que el desgobierno de Moreno va a golpear al Polo. Pero en el ámbito nacional, la platica de Chávez puede estár llegando: en la Costa ya ruedan promesas a mares y la compra de votos será la constante el 30 de mayo.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

BRABONEL.

Atrabilioso, se equivoca en asegurar que los grandes medios no le prestan a Samuel Moreno, lo que pasa es tanta ineficiencia no se puede ocultar sin embargo Caracol TV el sesgo a favor del PL y la Izquierda no pasa desapercibida. Durante la emergencia social el canal de Santo Domingo sacaba a cada hora “expertos” que le pegaban duro al Gobierno Nacional pero durante el paro en Bogotá los únicos que tenían la palabra era la gente de la administración Moreno y hasta los mismos periodistas reiteraban que los culpables eran los trasportistas. A lo ultimo cuando se llego a la negociación final ¡el canal caracol mostro como a un héroe a Samuel Moreno! Ese canal es peligroso para la democracia y el progreso del país. Otra cosa, nunca hablo de la marcha en contra del Alcalde.

Miguel dijo...

Estamos de acuerdo. Las alcaldías de Garzón y Moreno son de las peores de Bogotá.

Sin embargo, Peñalosa y Mockus sólo eran superiores en sentido muy superficial.

Bogotá nunca ha tenido un alcalde con una visión para la ciudad, donde se beneficien todos.

Atrabilioso dijo...

BRABONEL:

Hace un par de meses, Samuel Moreno se quejó de la posición que tenían los medios frente a su gestión. Por esa misma época, la Alcaldía citaba a los medios "alternativos" para ofrecerles cositas y publicar lo que le convenía al desgobierno distrital.

Sin embargo, usted tiene razón: el primer día de paro, tanto Caracol como RCN fueron tan, pero tan sesgados, que los televidentes terminaban completamente desinformados. Ahí tengo que destacar nuevamente a City Tv, cuyo noticiero hizo una buena cobertura, muy superior a la de los canales privados, y con un mejor equilibrio en el manejo de la información.

Es que la publicidad de la Alcaldía funciona muy bien.

Un abrazo.

Atrabilioso dijo...

MIGUEL:

No estoy de acuerdo con su posición frente a Peñalosa y Mockus. El primero generó realmente un cambio importantísimo en el sistema de transporte y en el respeto por los espacios peatonales. Sus aportes en cuanto a ciclorrutas y parques, además de temas como educación y cultura, no se pueden despreciar. ¿Y Mockus? Fue el primer alcalde que enfrentó la mafia del Concejo de Bogotá, hizo un manejo eficiente de los recursos y siempre tendré presentes sus esfuerzos por la cultura ciudadana. Además, desvertebró el cartel de la Policía de Tránsito.

Sin embargo, el asunto merecería un debate mucho más profundo.

Un saludo.

Miguel dijo...

Reconozco que cometí un error al pensar que sería un cambio positivo para Bogotá el apoyar Garzón y a Moreno.

Sin embargo, insisto, Peñalosa y Mockus eran alcaldes mediocres. Hay que reconocer que tenían algunas ideas buenas, adaptadas de ciudades del primer mundo, pero mal implementadas y sin ninguna profunda vinculación entre sí.

A Peñalosa le reconozco su aprecio por las ciclorutas y la implementación del transmilenio.

Pero las ciclorutas del último fueron mal planeadas y mal integradas con el sistema de transporte, y se les olvido organizar un sistema de alquiler de bicicletas (como en París, que es una empresa privada).

El transmilenio, fue un fracaso en implementación. Muy mediocre la planeación también. Y lo peor es que los articulados son contaminantes, cuando podían haber usado algún sistema más ecológico.

Por eso digo, sólo hemos tenido alcaldes mediocres.

D. dijo...

Hablando de alcaldes mediocres, la última de la alcaldía de Bogotá ya es el colmo.

¿Cómo les parece que un fulano abogadito que trabaja en la Secretaría de Medio Ambiente de Bogotá demandó la firma del acuerdo de cooperación militar de Colombia con Estados Unidos?

Ahora resulta que por el capricho "nacionalista" de un mamerto afiliado a un partido cómplice de las farc, podríamos quedar desprotegidos ante una invasión chavista, o al menos la protección podría demorarse varios meses más en hacerse efectiva.